Reseña

Rizoma

Una breve pero precisa lectura del libro de Carlos Yushimito

Liliana Colanzi 

Los cuentos de Carlos Yushimito combinan la imaginación desaforada con una escritura vibrante y atmósferas oníricas y extrañas. En los diversos mundos de este escritor peruano no hay lugar para epifanías subterráneas.

En Rizoma -una sátira sobre el mundo de la gastronomía en Perú- los zombies-cinocéfalos arrasan la ciudad, mientras el narrador los contempla desde lo alto de una noria. En Los que esperan, un periodista de crónica roja registra la aparición de monstruos que anuncian la llegada del fin del mundo.

Los cuentos que componen este volumen apuntan a lo extraordinario y lo enigmático, mezclan el lenguaje de la ciencia con el discurso esotérico y religioso: “¿Qué son los virus sino seres fantasmales, fantasmas puros que flotan en el mundo esperando poseer una célula humana para corporizarse y hacerse vida? Ahí los ve y no los ve. Todos los días. Monstruos perfectos”, dice el narrador de Los que esperan.

Los “monstruos perfectos” de Yushimito señalan la tensión entre las ansias de modernidad y las tradiciones milenarias, entre el saber ilustrado y los hechizos ancestrales: en Rizoma, el tono academicista ligado al ambiente gourmet contrasta con los orígenes (¿mágicos?) de la peste, que a su vez se erige como recordatorio del pasado colonial de Perú.

Yushimito se mueve por los escenarios de la literatura de género -el horror, la fantasía, la ciencia ficción-, reinventando estos registros a través de un lenguaje barroco, excesivo y al mismo tiempo cuidadoso del más mínimo detalle. Sus relatos provocan el asombro de las historias maravillosas, la inquietud de lo incomprensible y el vértigo de una prosa alucinatoria.

Desde la aparición de Las islas, Lecciones para un niño que llega tarde y Los bosques tienen sus propias puertas, Yushimito ha demostrado ser un autor capaz de reinventarse en cada uno de sus relatos y de imprimir un sello propio a su universo narrativo. La aparición de Rizoma con la editorial La perra gráfica es una excelente noticia para los lectores bolivianos.