El camino del retorno.
Tres escritores bolivianos
Una invitación a aproximarse a la literatura de Antezana, Hasbún y Ferrufino. Sobre todo, a leerlos.
Mauricio Murillo
En este texto, debido al espacio disponible, no
podré realizar una crítica y una lectura profunda de la obra de Claudio
Ferrufino-Coqueugniot, Rodrigo Hasbún y Sebastián Antezana. Pese a esto, y para
no caer en una semblanza que se puede encontrar en varias páginas de Internet o
en la solapa de sus libros, intentaré presentar e invitar a los lectores a leer
lo que estos tres escritores bolivianos han escrito.
La excusa para hablar de estos tres autores es que
son parte del ciclo “Migrantes” programado para la Feria Internacional del Libro
de La Paz que comenzó esta semana. Ellos llegarán a La Paz y tendrán charlas
con el público y con distintos críticos y escritores. Para que podamos conocer
algo más de los libros que publicaron, acá va una breve y subjetiva
presentación.
Ferrufino-Coqueugniot
Tal vez, algo que llama la atención en primera
instancia dentro de la carrera literaria de Claudio Ferrufino-Coqueugniot es
que ha ganado dos premios literarios muy importantes. En 2009 fue galardonado
con el Premio Casa de las Américas por su novela El exilio voluntario. Dos años después, en 2011 ganó el Premio
Nacional de Novela, acá en Bolivia, con Diario
secreto.
Estos premios, uno de ellos internacional, hablan
de una carrera de alguien, como Claudio, que se ha dedicado de lleno a la
literatura. Sus novelas tienen un dejo autobiográfico que se fusionan con una
manera particular de manejar el lenguaje. En El exilio voluntario la singular manera de armar y ordenar las
oraciones hace que la escritura sea distinta a sus contemporáneas. Como lo
marqué, la mirada autobiográfica, siempre pasando por el lente de la ficción,
por supuesto, construyen la historia de un cochabambino y sus devenires en
Estados Unidos.
Hasta ahora, creo que su obra más importante es Diario secreto. Si bien se la puede
relacionar con El señor don Rómulo y El exilio voluntario, funciona también
como un parte aguas en la obra general de Claudio. El humor, la violencia y la
mirada disparatada que encontramos en el narrador de la novela la constituye como
un libro destacado.
Hasbún
El escritor boliviano joven, contemporáneo que ha
tenido más reconocimiento y lecturas en el exterior es Rodrigo Hasbún. Fue
reconocido por la revista Granta, ha publicado en Duomo, Demipage y Random
House. Desde la publicación de su primer volumen de cuentos, Cinco, ha conformado una carrera
literaria sólida y con una propuesta interesante. Tal vez habría que marcar su
importancia desde la publicación de El
lugar del cuerpo. Un libro distinto en el horizonte literario boliviano, ya
sea por su temática, pero también por lo depurado de su lenguaje.
Su libro de cuentos que destaca es Los días más felices, publicado en
España. Los doce cuentos que son parte de este volumen exponen de manera clara
la búsqueda literaria de Rodrigo y su poética. Los temas que venía
desarrollando hasta la publicación de Los
días más felices y que seguirá visitando -también en Los afectos, por ejemplo, su más reciente novela- los encontramos
en estos relatos. En este sentido, tal vez una de las habilidades de Rodrigo es
volver siempre a sus obsesiones y revisitar temas ya relatados pero no
repetirse y ofrecerle siempre algo nuevo al lector.
Su nueva obra es Los afectos -que presentará Editorial El Cuervo en esta FIL- una
novela que desde su fragmentación cuenta la historia de una familia alemana
afincada en Bolivia. Si el lector pudiera conseguir estos dos últimos libros
que he descrito fugazmente, le aconsejaría que no perdiera la oportunidad de
leerlos.
Antezana
“Comienza como un movimiento fortuito e imprevisto,
casi como una broma, una serie de casualidades que lo llevan a uno a internarse
en situaciones nunca concebidas y tampoco deseadas”.
Así empieza La
toma del manuscrito de Sebastián Antezana. Con esta novela, el escritor
paceño ganó el Premio Nacional de Novela en 2007. A lo largo de sus 10 primeras
páginas, en las que se desarrolla una suerte de prólogo, leemos lo que funciona
como un gesto metaficcional que ordena la novela.
La toma del manuscrito, una obra de largo aliento, marca desde
la parodia y la metaficción un camino literario que apela al lector. Sebsatián
es hasta la fecha el escritor que más joven ganó el premio literario más
importante del país. De las obras galardonadas, esta es una de las más interesantes
y divertidas de leer.
Para ser un escritor de la calidad de Sebastián,
publicar solo dos libros hasta ahora pareciera poco. Su segunda novela, una
novela corta, es El amor según.
Publicada en Bolivia por editorial El Cuervo y en Estados Unidos por Sudaquia.
Es un libro que casi se opone al primero. Desde la mesura, el leguaje, los
temas, esta segunda novela se aleja de la primera para construir una nueva
visión. Este gesto me parece interesante: un escritor que no acaba de
construirse como tal, que no deja de buscar. La primera novela de Sebastián ya
no es tan fácil de conseguir, pero ojalá la puedan encontrar. La segunda estará
en el stand de El Cuervo
Cierre
Este breve texto sobre los tres autores bolivianos
que serán reconocidos y se presentarán en distintas charlas puede quedar corto.
Como expliqué, el espacio no me permite hacer algo que con mucho placer haría:
leer en profundidad y detalle muchos de estos libros que he descrito.
Antes de terminar habría que pensar también en
cómo funcionan estas tres obras en diálogo. Claudio, por la edad, es tal vez el
que se aleja un poco más de las otras dos obras -Rodrigo y Sebastián estudiaron
en la misma universidad en Estados Unidos. No sé qué los une o cuáles son los
puentes que se tienden entre sus escrituras.
Más allá de los premios y reconocimientos, tenemos
acá a tres escritores de oficio, de los que todavía podemos esperar más libros
que valgan la pena. Esta Feria Internacional del Libro será una nueva
oportunidad para escucharlos pero, sobre todo, para leerlos.
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