Letras orureñas, cómo y por qué
Reproducimos el prólogo del libro Letras orureñas. Autores y antología –datado en agosto de 2014, en la población de Cotochullpa- y firmado por sus tres autores.
Adhemar Uyuni, René Antezana, Edwin Guzmán y Jorge Zabala, todos escritores orureños incluidos en el libro. |
Carlos Condarco, Benjamín Chávez, Martín Zelaya
Letras orureñas es
un libro que, bajo ese título metafórico, pretende constituirse en una fuente
de consulta para investigadores, estudiantes y lectores interesados en
literaturas regionales. Uno de los objetivos que nos impulsó a realizar este
trabajo fue la sistematización de una gran cantidad de información dispersa
acerca de autores y obras literarias, con la consiguiente actualización de
datos y, eventualmente, la corrección o precisión de los mismos.
Letras orureñas
revaloriza la obra de autores injustamente olvidados (v. gr. Rodolfo Soria
Galvarro, José María Dalence, Carlos Felipe Beltrán, los hermanos Ascarrunz y
otros). Por otro lado, el arco temporal que abarca el presente trabajo cubre
más de tres siglos, y al hacerlo valoriza la creación de escritores de nuevas
generaciones que, aun dando sus primeros pasos, ya cuentan con alguna
producción significativa.
A partir del libro precursor de Santiago Vaca Guzmán, La literatura boliviana. Reseña general de
los escritores en verso y prosa, publicada en Buenos Aires en 1883, varios
han sido los autores nacionales que pusieron su empeño en sistematizar el
decurso de la creación literaria. Podemos mencionar, entre los más conocidos, a
Rosendo Villalobos, que escribió Letras
bolivianas y a Ángel Salas, autor de Literatura
dramática en Bolivia, ambos trabajos publicados en el primer centenario de
la independencia de Bolivia.
Posteriormente, vieron la luz Historia de la literatura boliviana (1943), de Enrique Finot; a la
que siguió Literatura boliviana (1959),
de Fernando Diez de Medina. En 1987, Adolfo Cáceres Romero inició la
publicación de la Nueva historia de la
literatura boliviana, que al presente ha llegado al volumen IV.
Es amplio el panorama de la historia de nuestra literatura,
sin embargo, no ha ocurrido lo mismo con el estudio de las literaturas
regionales, a excepción de los trabajos de Carlos Condarco Santillán, autor de La literatura orureña durante el siglo XIX
(1976); de Mario Araujo Subieta, Potosí
periodístico y literario 1825 – 1984; y el de José Roberto Arze, Contribución de Cochabamba a la literatura
boliviana (2002). Letras orureñas
tiene el propósito de registrar sistemáticamente autores nacidos en Oruro o
avecindados en nuestra ciudad. No lo hace por generaciones, escuelas o
tendencias estéticas, sino por consignación bio-bibliográfica.
Agradecemos a los investigadores que nos antecedieron.
Mencionaremos, en orden cronológico a aquellos cuyo trabajo nos fue de mayor
utilidad: Panorama literario de Oruro
(inédito, 1976), de Carlos Condarco Santillán; la sección “Letras orureñas”,
del suplemento literario El Duende (1994 – 2006); La poesía en Oruro. Antología (2004), de Alberto Guerra Gutiérrez y
Edwin Guzmán Ortiz; Orureños en la
cultura boliviana (2006, 2013) de Elías Blanco Mamani; y, finalmente, Diccionario de autores orureños (2007),
de Lidia Castellón y Marlene Durán Zuleta.
Mención aparte merecen tres obras fundamentales de consulta:
Catálogo de la bibliografía boliviana
(1966), de Arturo Costa de la Torre; Pasión
por la palabra (1992), de Raúl de la Quintana y Ramiro Duchén, y Diccionario histórico de Bolivia (2002),
de Josep M. Barnadas.
A la hora de diseñar este libro se convino dedicarlo
íntegramente a la creación literaria, por consiguiente, están consignados
poetas, narradores, ensayistas literarios y dramaturgos; no así historiadores
ni autores de ciencias sociales. No obstante, como en toda regla, hay
excepciones debidamente fundamentadas, se decidió incluir al cronista José
Santos Vargas (el Tambor); Adolfo Mier, historiador; José María Dalence,
ensayista y Carlos Felipe Beltrán, destacado lingüista. El valioso aporte
intelectual de estas figuras históricas orureñas, ameritaba que sean tratados
como casos especiales.
Al momento de trabajar en las fichas bio-bibliográficas de
los autores, se tomó en cuenta a narradores, poetas y dramaturgos nacidos en
Oruro, y a aquellos que siendo oriundos de otras regiones desarrollaron buena
parte de su labor creativa en esta ciudad.
Letras orureñas.
Autores y antología presenta información de 124 escritores y escritoras.
Tenemos la seguridad de que existen más, y aunque en la bibliografía consultada
se hallaron datos referenciales de varios más, finalmente no fueron incluidos
por ser estos insuficientes.
Una de las condiciones metodológicas adoptadas para la
inclusión de determinado autor fue que datos suyos aparezcan consignados en al
menos dos fuentes bibliográficas distintas, es decir que ambas aporten datos
complementarios y no sea la una, mera copia de la otra, hecho percibido en
varios casos estudiados. Por otro lado, se consignan escritores que no figuran
en ninguna fuente consultada (generalmente por ser estos muy jóvenes), pero
cuya obra literaria fue leída y estudiada por los autores del presente trabajo.
La antología mínima, que corresponde a la segunda parte del libro, consigna
solo a 67 autores, tanto en prosa como en verso.
En cuanto a su presentación formal, este libro fue
organizado en dos secciones: fichas bio-bibliográficas, en las que se registran
datos básicos, académicos y editoriales de los escritores, además de
valoraciones y crítica a su trabajo y el detalle de su producción. En la
segunda parte, para la antología mínima se escogieron piezas o fragmentos
destacados –tanto en prosa como en verso– de la obra de algunos de los más
valiosos autores orureños; en ambos casos, con su respectiva información
bibliográfica.
Nos queda agradecer a la Fundación Cultural ZOFRO, cuyo
presidente, el ingeniero Luis Urquieta Molleda, supo acoger con entusiasmo la
idea de este trabajo y apoyarlo decididamente en todas sus fases. Asimismo,
expresamos nuestro agradecimiento a quienes atendieron con diligencia nuestros
requerimientos documentales. Nos referimos a los directivos y funcionarios del
Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (Sucre), la Biblioteca Central de la
Universidad Mayor de San Andrés (La Paz), el Centro de Documentación en Artes y
Literaturas Latinoamericanas CEDOAL (La Paz) y a la Biblioteca de
Investigadores de la Casa Municipal de Cultura (Oruro), sin cuya valiosa ayuda
este libro no se hubiese concretado. A todos ellos nuestro sincero
reconocimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario