miércoles, 12 de octubre de 2016

Etc.

¿Cómo se elige al Nobel de Literatura?


Desde Suecia, nuestro colaborador narra los pormenores de las semanas y horas previas a la elección y anuncio del mayor galardón mundial de las letras.



Carlos Decker-Molina

Dentro de una semana se conocerá el nombre del escritor laureado con el Premio Nobel de Literatura. Se fue el verano sueco que, por efecto del cambio climático, aún ilumina y calienta hasta finales de septiembre.
El proceso de elección comenzó meses atrás; en febrero se estudiaron más o menos 200 libros de escritores de “casi” todo el mundo. Luego de varias “vueltas” se eligió a 25. Los aspirantes deben haber figurado dos años mínimo, en las listas oficiales.
En abril, el académico Per Wästerber presentó una lista con 25 nombres que entró en consideración de la Academia. Según Wästerberg, luego de estudiarlos a todos los académicos eligen, sin orden de méritos, cinco finalistas. En esta etapa se pueden hacer cambios a la lista “oficial”, solo a través del voto de la mayoría. La lista con los cinco elegidos se guarda en una caja fuerte a la que solo dos empleados tienen acceso.
Los ejemplares leídos, que son varios, han sido comprados con mucha discreción para no despertar curiosidades. Las adquisiciones se hacen a través de alguna tercera persona “inocente del favor” y en diferentes capitales del mundo.
Durante el verano han sido leídos y releídos los libros de los cinco aspirantes. Según Wästerberg, es una costumbre que los académicos conozcan la obra de los aspirantes con anterioridad.  Muchos de ellos ya han figurado en listas de años anteriores. Pero, igual se los vuelve a leer.
La lectura de los académicos es estrictamente individual. Cada académico en su residencia o en su casa de verano o en algún lugar remoto de Suecia. No hay consultas ni intercambio de opiniones entre ellos. “Hay que evitar el contagio de opinión”.
A mediados de septiembre se dejaron sobre la mesa de la Academia los puntos de vista de los académicos en papeles escritos por cada uno de ellos. Nadie conoce el punto de vista del otro. Cada opinión es rigurosamente personal. Está prohibido hacer comentarios o discutir por E-post.
El primer jueves de septiembre se reunió la Academia y escuchó a los cinco académicos nombrados para el trabajo de lectura. El jueves próximo, aumenta la temperatura porque se produce el primer debate abierto con un intercambio de opiniones y argumentos.
Wästerber escribe que los académicos dominan 12 idiomas. Lo que hace suponer que muchos de ellos leen a los candidatos en el idioma original. Además, las listas anuales son de alguna manera reiteraciones de años anteriores lo que supone el conocimiento profundo de la literatura de los aspirantes. Naturalmente hay excepciones cuando aparece un escritor que, sin haber estado en las listas, surge por propia fuerza o es postulado por algún Nobel de Literatura o por alguna academia de la lengua.
En esta etapa los escritores aspirantes al premio, reciben “otros” nombres. A veces, un postulante masculino tiene el nombre de mujer o, como en el caso de Harlod Pinter, fue llamado “la salsa HP”.
A finales de septiembre se hace una elección previa, con voto secreto. Cada académico deja un papel con el nombre de su elegido en una urna de estaño. La elección formal se produce una semana antes de hacerla pública, es decir la primera semana de octubre.
En esa semana se procuran, con muchísima discreción, teléfonos y direcciones privadas para comunicarle la buena nueva al escritor premiado, a quien se le avisa exactamente una hora antes de hacer pública la información.
Modiano, por ejemplo, paseaba por los Jardines de Luxemburgo cuando la Academia lo llamó para avisarle que en una hora más se daría a conocer su nombre como el premiado con el Nobel 2014. El alemán Günter Grass recibió la noticia cuando iba camino al dentista. J.M. Coetzee gritó NO, NO a las cinco de la madrugada hora de Chicago. Cuando llamaron por teléfono a V.S. Naipul, respondió su esposa y dijo: “No se puede molestar a Sir Vidia porque está escribiendo”

El segundo jueves de octubre, algún escritor o escritora recibirá la llamada telefónica de la Academia Sueca con la buena nueva y una hora más tarde, es decir a las 13.00, el mundo conocerá el nombre del Nobel de Literatura 2016. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario